¡Buenos días, "el dispreciau"!
Hijo de musulmán de Kenia, Barack Hussein Obama (porque ese es su nombre completo), ha afirmado que es protestante, como todos los presidentes americanos –excepto el católico JFK-, y como todos ellos ha mencionado a Dios de una forma genérica e inconcreta.
Pero su agenda es descaradamente antirreligiosa y anticristiana. Comenzando por la cultura de la muerte (aborto y eutanasia) y siguiendo por su ataque a la familia (al imponer el matrimonio homosexual y la ideología de género). Y no sólo en EEUU sino también ese inmenso patio trasero del Imperio que es América Latina y África. Con la Momia europea no hace falta, se está estrangulando ella sola.
En la Constitución de EEUU ninguna religión prevalece sobre las demás, pero se garantiza el derecho de todos a la libertad religiosa. Eso en la teoría, porque en la práctica los católicos han sido considerados históricamente como ciudadanos de segunda, frente a los luteranos que constituían la élite WASP (blanco, anglosajón, protestante) y que llevaba las riendas políticas y económicas de la Unión.
Con Obama, la animadversión contra los cristianos en general y los católicos en particular se ha exacerbado. ¿Por qué? Porque son de los pocos que se atreven a plantar cara a su agenda anti-vida y anti-familia.
Un caso paradigmático es de las Hermanitas de los Pobres que tuvieron el valor de interponer una demanda para que se les exima del mandato abortista que las obligaba a pagar un seguro de salud que incluye anticonceptivos, esterilización y fármacos abortivos.
El Gobierno ha tratado de presionar a estas monjitas –que llevan en EEUU desde 1868 y atienden una treintena de casas repartidas por toda la Unión-, pero el Tribunal Supremo les ha dado la razón. Y ahí las tienes, poniendo palos en la rueda del mayor Imperio de la tierra, haciendo uso legítimo de la libertad religiosa, reconocida en la Primera Enmienda de la Constitución.
Quizá eso pueda explicar que en un informe, el presidente de la Comisión de Derechos Civiles del Gobierno llegue a equiparar “libertad religiosa” con “homofobia, islamofobia” e “intolerancia”. Actuall lo desvela en un reportaje firmado por Javier Lozano, redactor jefe, que aparecerá el próximo lunes. Y te lo adelanto en exclusiva, como suscriptor del periódico.
Las espadas están en alto. Por un lado, la Administración Obama que con su despotismo antirreligioso no duda en cargarse el contenido de la Primera Enmienda; y por otro, grupos cristianos –como las Hermanitas de los Pobres- que como Pablo de Tarso, reclaman sus derechos de ciudadanos, y apelan a la Constitución y a los tribunales.
¿Y si tomáramos nota en Europa?
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¡Hasta el sábado que viene!
Alfonso Basallo y la Redacción de Actuall.
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