Temas de la justicia
El Gobierno camina por los límites de la República
Por Adrián Ventura
Noticias de Política: Jueves 31 de diciembre de 2009 | Publicado en edición impresa
El Gobierno está empujando al país a vivir fuera de los límites de una República: la intimidad, la propiedad y la libertad están quedando en manos de un sólo hombre, Néstor Kirchner, sin que la Justicia ni la oposición muestren suficiente vitalidad para ponerle límites.
En medio de las distracciones que producen los fines de año, el matrimonio Kirchner redobló sus desafíos y se valió, precisamente, de torpezas cometidas por la oposición. Sólo una decisión de la Corte, que le pide informes al Poder Ejecutivo sobre la utilización de las reservas del BCRA, y los fallos contra la ley de medios parecen poner un poco de cordura en un escenario de inseguridad jurídica.
El lunes último, el ex presidente Néstor Kirchner obtuvo un sobreseimiento por enriquecimiento ilícito, pero sólo fue posible por una combinación de cuatro elementos: un perito que actuó livianamente, dos fiscales que no tienen voluntad de investigar, un juez que cierra la causa apresuradamente y una oposición que no se preocupó por aportar datos que obligaran a la Justicia a profundizar la pesquisa. Hubo un contraste irritativo: ese mismo día, la AFIP les anunciaba a los ciudadanos que está dispuesta a mirar con lupa todas las tarjetas de crédito que superan los 3000 pesos mensuales de consumo.
También fueron los legisladores opositores los que, hace apenas dos meses, permitieron votar las leyes de extracción compulsiva de sangre (leyes 26.548, 26.549 y 26.550): esas normas, contra toda lógica, establecieron que el Banco Nacional de Datos Genéticos (BNDG), que dependerá del Poder Ejecutivo, será el único perito admisible en las causas judiciales por desaparición de personas. Ahora, el Poder Ejecutivo le dice a los jueces lo que tienen que hacer y no les permiten hacerse asesorar por peritos independientes.
Ayer, los hijos adoptivos de Ernestina Herrera de Noble se convirtieron en las primeras víctimas de esas leyes. Y un juez federal, Conrado Bergesio, en apenas 24 horas, dictó dos resoluciones muy difíciles de conciliar: luego de ordenar un peritaje conforme con las características que había ordenado su superior, la Cámara de Casación Penal -al que se sometieron los hijos de la directora de Clarín -, giró sobre sí mismo y, quizá temeroso de perder su cargo en un juicio político que pudiera promover la Asociación Abuelas de Plaza de Mayo, ordenó hacer otro estudio en el Banco Nacional de Datos Genéticos.
La ley de medios y los ataques contra Papel Prensa, en cambio, por ahora no le están rindiendo frutas dulces al Gobierno: cuatro jueces frenaron la aplicación de la controvertida ley, a pedido de grupos de medios (Vila y Clarín ), particulares y ONG y, en la causa de Papel Prensa, varios funcionarios estatales coincidieron en declarar contra el secretario de Comercio Interior, Guillermo Moreno. El debate judicial sobre los medios quedará para febrero, pero la presión política seguirá sin pausa.
La inseguridad jurídica, la ruptura del derecho y de la lógica democrática está llegando a niveles extremos.
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Por Adrián Ventura
lanacion.com | Política | Jueves 31 de diciembre de 2009
el dispreciau dice: Argentina se debate entre los extremos porque su sociedad no ha establecido aún sus términos medios. Estamos repletos de leyes que nadie cumple o bien que se trasgreden según el cargo público, incluyendo a los propios jueces. Eso habla muy mal de nuestros criterios. La República entonces está en jaque permanente por éstos o por aquellos que transforman en víctimas a masas públicas según sus intereses. La historia de nuestro país está plagada de atropellos, mentiras, falacias y otras tantas falsas interpretaciones. La actitud despreciativa de la actual gestión de gobierno lo es porque su oposición tan declamada actúa de manera semejante, atropellando y despreciando, esencialmente arrogándose el/los derecho/s por sobre los súbditos ciudadanos que tienen voto pero no voz. Traducido, todos se pelean por controlar al otro pero nadie aporta a la sociedad como tal y esta se va desgajando de valores en su eterna búsqueda por sobrevivir a los desatinos políticos, cada vez más marcados. Tal lo expresé en alguna oportunidad, tenía la esperanza de hallarme ante una Cristina Fernández superadora de las gestiones políticas anteriores ya que inteligencia no le falta y capacidades tampoco, sin embargo la realidad ha sido bien otra... y la Argentina hoy está sumida en la inseguridad pública y jurídica, lo cual es más que peligroso de cara al futuro incierto. Si había razones políticas para avanzar sobre el campo, nunca quedaron explícitas y todo se expresó como un antojo del poder. Lo mismo sucedió con las AFJP que no se traduce como otra cosa que no sea un atropello político consensuado. La Ley de Medios aparece como un arma para desplazar enemigos y no para crear equilibrios... seguramente hay razones de sobra para avanzar contra los pretendidos monopolios de los medios que hacen un culto del desastre, pero las gestiones gubernamentales no realizan ninguna tarea superadora que agregue valor. Así como el Canal Encuentro fue una iniciativa destacable, y ampliar el rango de llegada del histórico Canal 7 también lo fue, los mecanismos de discursos vacíos que han nutrido a este último desmerecen otras iniciativas con alto valor agregado tales como ESTUDIO PAÍS 24 que se ve opacado por posteriores mensajes que alientan la desunión, el conflicto, la burla y la descalificación. Si queremos sumar, no podemos partir de la resta... Los antojos por más impuestos y por sumar recaudación e inflación para nutrir el temible y creciente gasto público augura un 2010 más complejo que el año concluido. Por otra parte, sustentar las gestiones con obra pública pero sin incluir personas es una paradoja que afecta a la sociedad argentina como un todo. Queda claro que el 2010 enseñará a los argentinos un gobierno y una oposición empeñados en destruirse pero de ello la única víctima real será la propia sociedad, demostrando que los actuales no son ni mejores ni diferentes a los anteriores criticados hasta el hartazgo. La clase política debe ser reconstruida con mejores aportes sociales, equilibrados en sus objetivos tanto como en sus propuestas sociales. De no ser así, 2010 será el año del bicentenario con mucho más de lo mismo, nuevas frustraciones, renovados atropellos, y más vejaciones públicas al derecho ciudadano, hoy por hoy completamente avasallado a manos de hordas piqueteras con muchos intereses personalizados pero ninguna propuesta proactiva concreta que beneficie a alguien que no entregue su dignidad. En lo personal esta no es la Argentina que quiero para mis hijos y nietos, por lo tanto no puedo reconocer a esta clase política como tampoco lo hago con la sindical, la económico-empresaria, y con muchas organizaciones sociales que lo único que pretenden es construir más exclusión social para poder sustentar sus bajezas. Mi vida ha transitado por Villa Celina y por Mataderos (muy cerquita de Ciudad Oculta), sé de pobrezas y padecimientos que no me contó nadie, pero que quede claro: "los pobres no roban", antes bien hace de su pobreza un culto de resignación ante el destino y caminan por la vida agradeciendo cada mendrugo de pan... ante ello, la soberbia aparece como despreciable, más allá del desprecio que instala y genera. Creo en lo que suma, no en aquello otro que "resta" para luego declamar que "suma"... Enero 01, 2010.-
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