'La de Siria es la peor crisis humanitaria del momento'

El trabajo de Médicos Sin Fronteras en 2014 se ha centrado en conflictos y crisis olvidadas
La epidemia de ébola ha sido el otro gran pie de su acción humanitaria
El presidente de la organización ha criticado la lentitud de la respuesta internacional
La cooperante ingresada en el Carlos III continúa sin síntomas

Refugiados en Erbil Fyash Kabour, el paso fronterizo entre Siria e Irak, el pasado agosto. NILS HENRIK

Clara MarínMadrid

Actualizado: 03/12/2014 14:14 horas

La organización internacional Médicos Sin Fronteras (MSF) ha presentado esta mañana en Madrid su balance anual de operaciones humanitarias a nivel mundial, donde se ha alertado del olvido en el que han caído conflictos como los de Sudán del Sur, Siria, República Centroafricana y República Democrática del Congo, y se ha aprovechado para criticar la lentitud de la respuesta internacional frente a la crisis del ébola. "2014 ha sido un año muy duro y no hay nada que nos haga esperar que 2015 vaya a ser mejor", ha declarado en rueda de prensa José Antonio Bastos, presidente de la organización médica en España.

Carlos Francisco, coordinador de proyecto de MSF, también estaba en la presentación y ha explicado las tremendas dificultades logísticas, burocráticas y de seguridad a las que se enfrentan en los contextos bélicos y de conflicto. "Es muy difícil para nosotros trabajar en sitios donde los hospitales han sido destruidos y si los volvemos a poner en marcha corren el riesgo de volver a ser atacados, con el objetivo de dañar aún más a la población", ha señalado.

Francisco acaba de volver de Siria, país que ya ha superado los tres millones de refugiados y los seis millones de desplazados. "La de Siria es quizás la peor crisis humanitaria del momento", ha apuntado Bastos, sin olvidarse de otros escenarios enormemente preocupantes como República Democrática del Congo, "donde la situación no ha mejorado nada".

Todas ellas, situaciones altamente conflictivas y sumamente crueles con la población civil en la que los retos sanitarios son enormes. En los campos de refugiados, por ejemplo, una de las primeras prioridades es la vacunación, "porque una epidemia de sarampión puede ser un desastre", explicaba Francisco, y también el buen saneamiento y el agua potable, para prevenir los brotes de cólera.

"La atención primaria es lo que más vidas salva, no hacen falta coberturas sanitarias muy complicadas", ha señalado Francisco. Intervenciones tan simples como proporcionar abrigo a la población Siria para evitar infecciones respiratorias, que ya afronta el cuarto invierno en medio de la guerra, son necesarias y urgentes.

"Además, si hay violencia contra los civiles hacemos un esfuerzo en cirugía", explicaba Francisco, al tiempo que Bastos recordaba la importancia de la salud materno infantil, dada la fragilidad de las mujeres que están a punto de parir y los niños recién nacidos. Además, el presidente de MSF ha puesto en relieve la importancia de la salud mental, ya que, según ha declarado, "es impensable que una comunidad a la que están masacrando no vaya a tener secuelas psicológicas".

Además de los escenarios bélicos, sin duda el otro gran foco de MSF durante el año que está a punto de acabar ha estado en los países de África Occidental donde se ha desarrollado la epidemia de ébola más grave de la historia. En este sentido, Bastos ha subrayado la "capacidad chocante de la comunidad internacional de ignorar problemas que afectan a millones de seres humanos", y ha criticado la respuesta humanitaria que, en su opinión, "ha estado por debajo de las necesidades".

En cuanto al momento actual de la epidemia, el presidente ha dicho que, aunque va a seguir creciendo, "ya hemos pasado la etapa de estar desesperados por no recibir ninguna respuesta internacional". La organización ha criticado la decisión de muchos países de no enviar equipos de personas especializadas para combatir el virus y optar, en cambio, por financiar a ONG, "algo mucho más lento", ha explicado Bastos.

MSF sigue haciendo hincapié en que es imprescindible contener la epidemia en origen, cuestionando así la decisión del Gobierno español de dedicar 14 millones de euros a la gestión del virus en España (repartidos entre el Ministerio de Defensa y el de Sanidad) y siete millones -justo la mitad- para su control en África. "Es sorprendente esta falta de coherencia", ha expresado Bastos, manifestando que lo lógico hubiera sido una inversión en la distribución de las cantidades, ya que "mientras no se controle la epidemia en África seguirá habiendo ébola en los países occidentales".

Respecto a la cooperante de la organización que fue repatriada el pasado 21 de noviembre desde Mali, Bastos ha aprovechado para agradecer a los medios el respeto que han mostrado al mantener en el anonimato a esta persona, reiterando que MSF no tiene intención de compartir su información clínica. "Ella está bien, sigue en observación porque ha tenido un contacto de alto riesgo, pero ahora mismo está asintomática", ha explicado, recordando que hay que esperar 21 días hasta que se pueda afirmar con certeza que la cooperante no tiene ébola.

La presentación también ha servido para lanzar el proyecto 'Éxodos', un documental web en el que se explican las dificultades que atraviesan los refugiados, los desplazados internos y los migrantes. "El sufrimiento no tiene categorías. La condición legal de estas personas no debería condicionar su acceso a la ayuda humanitaria", ha señalado Agus Morales, coautor del documental.