BASURERO ESPACIAL

15.500 fragmentos de basura espacial rodean la Tierra
El aumento de restos de cohetes, satélites y explosiones suponen una seria amenaza para la integridad de las misiones espaciales
NASA
La región del espacio a 2.000 kilómetros de la superficie de la Tierra es donde más se concentra la chatarra espacial

EP / madrid
Día 01/09/2010 - 14.27h

La basura espacial ha aumentado un tres por ciento durante este primer semestre de 2010 y ya rodean a la Tierra más de 15.550 escombros, desde viejos cohetes y lanzadores hasta satélites en desuso, según se desprende del último informe trimestral de la Oficina del Programa de la NASA de Restos Orbitales (NASA Orbital Debris Program Office).

La 'basura espacial' es la cantidad de satélites activos o inactivos que han sido lanzados o bajados de sus órbitas para ser hundidos en el mar, cohetes espaciales antiguos y en funcionamiento, y demás objetos, procedentes de la fragmentación de residuos generados, por ejemplo, en explosiones.

Así, en seis meses el número de restos espaciales ha pasado de los 15.090 a los 15.550, un tres por ciento más que hace seis meses y un 4,6 por ciento más que hace un año, un aumento significativo si se tiene en cuenta que se ha pasado de los 14.863 almacenados en julio de 2009 a los 15.550 actuales.

La estadística de países y organizaciones que desechan estos aparatos se repite y, en este semestre, de los 15. 550 cuerpos espaciales, la 'Commonwealth of Independent States' (CIS), Reino Unido y sus colonias, es la que mayor cantidad de basura registra en el espacio, con un total de 5. 833 objetos; seguida de Estados Unidos con 4. 824, y de China con 3. 388.


La ESA, la más limpia
Mientras, la Agencia Espacial Europea (ESA) es la entidad con menos basura espacial, con tan sólo con 83 cuerpos, de los que concretamente 39 proceden de explosiones y 44 son cohetes, cuerpos y demás escombros.

Después, hay países, que independientemente de la agencia espacial a la que pertenezcan, también envían y 'tiran a la órbita terrestre' aparatos espaciales. Así, sería el caso de los 472 de Francia, los 190 que tiene Japón, o los 170 de la India.

La NASA cuenta con el programa 'U. S Space Surveillance Network', una iniciativa del Ejecutivo estadounidense que detecta por radares estos cuerpos, que deben superar los cinco centímetros, los controla, cataloga e identifica, además de predecir cuándo y dónde caerán en la Tierra.


A más CO2, más basura
Por otro lado, un estudio de la Universidad inglesa de Southampton sugiere que el aumento de dióxido de carbono atmosférico, que provoca el cambio climático, no sólo elevaría el nivel del mar o derretiría a los glaciares, si no que también favorecería la proliferación de la basura espacial.

Después de analizar información sobre 30 satélites en los últimos 40 años, este equipo de científicos ha confirmado que las capas superiores de la atmósfera están perdiendo densidad, como consecuencia del incremento del CO2, que hace que los satélites permanezcan en órbita hasta un 25 por ciento más de tiempo, aumentando la posibilidad de colisiones y accidentes espaciales.

"Una nave que normalmente permanecería en órbita unos 25 años ahora podría hacerlo 30 por estos cambios en la atmósfera", puntualiza a la BBC el principal investigador, Hugh Lewis
http://www.abc.es/20100831/ciencia/trozos-basura-espacial-rodean-201008311722.html

el dispreciau dice: si usted o yo dejáramos desperdicios tirados por allí, enseguida seríamos perseguidos por organizaciones internacionales recriminadoras de las incapacidades ajenas... y aún cuando despertásemos curiosidades cartoneras en terceros condenados por estados políticos incapaces, ésta conducta sería señalada con todos los dedos de cada mano... Ahora bien, si Estados Unidos y Europa dejan tirados miles de partículas "basura" en el espacio, eso está bien porque quien reparte las culpas es el que fabrica las reglas, y da la casualidad que sus legislaciones siempre miran en el ojo ajeno aquello que no se descubre en el propio... y la basura espacial está fuera del alcance de las manos de cartoneros y excluidos, esos mismos que ellos inducen a través de sus pretensiones e incapacidades. En este estado de locura que transitamos, alguien podría desear tener un carro cartonero apropiado para circular por el frío sideral, juntando bulones consecuentes de carcazas perdidas que dan vueltas a la Tierra, condenadas a vagar en órbita sin que nadie atienda los peligros ya que casi siempre estos objetos caen en países de pobres donde las víctimas constituyen "daños colaterales", al tiempo que sus responsables y ejecutores son "científicos" de buena cepa que intentan descubrir qué esconde Marte. Parece un discurso ridículo, pero no lo es, antes bien pertenece a nuestra más temible realidad, esa de decir una cosa y hacer lo que nos conviene para "joder" al prójimo. Alguien se atrevió a decir por allí que los humanos, envidiando a los anillos de los planetas exteriores (todos los tienen, algunos visibles y otros invisibles). se han decidido a fabricar el propio... y dado que algunos otros creen y hasta están convencidos que este mundo es una basura, la NASA y sus socios, han asumido con criterio esto de darles la "razón". Cualquier realidad humana supera a la ficción más sabia, de allí que los extraterrestres huyan de este mundo sin intentar siquiera establecer un vínculo de mínima. Septiembre 04, 2010.-