martes, 25 de marzo de 2014

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Un clima cada vez más extremo | Sociedad | EL PAÍS



Un clima cada vez más extremo

Los científicos alertan de que ciclones, inundaciones y otros fenómenos radicales se acentúan 13 de los 14 años más cálidos se han producido este siglo





El municipio filipino de Tolosa tras el paso del tifón Haiyan. / JOHN JAVELLANA (REUTERS)


Olas de calor, sequías, ciclones, inundaciones… El año 2013 ha sido un buen ejemplo de cómo los fenómenos meteorológicos extremos impactan en comunidades y regiones enteras. El tifón Haiyan arrasó zonas del centro de Filipinas, Oklahoma (EE UU) sufrió el mayor tornado jamás observado, nevadas sin precedentes azotaron Israel, Jordania y Siria. La declaración anual de la Organización Meteorológica Mundial (OMM) sobre el estado del clima mundial, presentada ayer en Ginebra, alerta de que se acentúan los episodios climáticos extremos e insiste: si se producen es porque la acción del hombre está detrás de los cambios del clima.

Una experta dice: “Vemos que muchos episodios ocurren como se previeron”
La tendencia al calentamiento mundial a largo plazo sigue plasmándose en las estadísticas. El 2013 ha sido, junto con 2007, el año más cálido desde que se tienen registros. Pero, además, según destaca el informe de la OMM, 13 de los 14 años más cálidos se han producido en el siglo XXI. Cada uno de los tres últimos decenios ha sido más cálido que el anterior (el récord lo tiene 2001-2010). El promedio de la temperatura registrada en la tierra y en la superficie de los océanos fue el año pasado de 14,5 grados centígrados, es decir, aumentó en medio grado respecto a la media de los años sesenta, setenta y ochenta. Datos que se traducen en récords: Australia registró el año más caluroso de la historia; Argentina, el segundo.
¿Pueden todos o parte de estos fenómenos atribuirse al calentamiento global? Jessica Blunden, científica de la Administración Nacional Oceánica y Atmosférica (NOAA) y una de las autoras del estudio, señala que “siempre ha habido, y siempre habrá, fenómenos meteorológicos y climáticos extremos y variaciones naturales debidas a factores como El Niño o La Niña”, pero recuerda que el Panel Intergubernamental de expertos sobre el Cambio Climático (IPCC, en sus siglas en inglés) dijo en septiembre que el calentamiento es “inequívoco” y que “la influencia humana está clara”.


“Vemos muchos casos en los que los episodios extremos se producen tal y como los científicos habían proyectado en función del cambio climático”, explica Blunden por correo electrónico. “Por ejemplo, en distintas zonas por todo el mundo se han predicho olas de calor más extremas, chubascos copiosos y sequías más intensas, y ahora estamos viendo que esos fenómenos ocurren. Por desgracia, no es tarea fácil analizarlos en cuanto suceden y atribuirlos, o no, al cambio climático”, añade. Para explicarlo, Blunden alude a un estudio que incorpora el informe de la OMM acerca de las temperaturas récord registradas en Australia en 2013.
El trabajo, realizado por científicos de la Universidad de Melbourne (Australia), utilizó nueve modelos climáticos para estudiar si los cambios en la probabilidad de que se registraran temperaturas extremas durante el verano australiano se debían a la influencia humana. Demostraron que el récord de 2013 como año más caluroso “hubiera sido prácticamente imposible sin los gases que retienen el calor de origen humano, lo que demuestra que algunos fenómenos extremos es mucho más probable que se produzcan debido al cambio climático”. En este caso, señala Blunden, “el estudio establece un vínculo directo entre el cambio climático y ese calor sin precedentes”.
También el secretario general de la OMM, Michel Jarraud, precisó ayer durante la presentación del informe que, “muchos de los fenómenos meteorológicos extremos que se produjeron en 2013 se correspondían con las consecuencias que se esperaban que tuviera el cambio climático provocado por la actividad humana”. Ejemplos: “Precipitaciones más fuertes, un calor más intenso y un mayor número de daños causados por mareas de tempestad e inundaciones costeras como resultado del aumento del nivel del mar”. El tifón Haiyan sería el mejor ejemplo de ello, añadió.
Manuel de Castro, catedrático de la Universidad de Castilla-La Mancha y uno de los autores españoles del informe del IPCC, asegura que hay algunos fenómenos extremos que se relacionan con mayor seguridad con el cambio climático, “sobre todo cuando hablamos de olas de calor, puesto que se tiene evidencia clara de que hay una tendencia creciente”, señala. En otros episodios, como lluvias torrenciales o ciclones tropicales, “hay menos evidencia, aunque eso no quiere decir que no se puedan achacar al calentamiento global”. “Es una explicación plausible pero no se puede asegurar al cien por cien hasta que no tengamos más evidencia”, añade.
Con un escenario así, los sistemas de predicción meteorológica serán esenciales, asegura Blunden. “Especialmente por el crecimiento de megaciudades muy pobladas, generalmente situadas en zonas costeras vulnerables a ciclones, crecidas e inundaciones”. Y añade: “Gracias a las predicciones, India pudo evacuar a cerca de un millón de personas antes del ciclón tropical Phailin, y redujo enormemente la pérdida de vidas”.

Los olivareros saldrán beneficiados

ALICIA RIVERA
El aumento de la temperatura media de la Tierra en 1,8 grados centígrados, hacia mediados de siglo, hará más rentable el cultivo del olivo en la cuenca del Mediterráneo, especialmente en el norte de África, donde los beneficios obtenidos pueden aumentar un 41%. El incremento medio de la cosecha en la zona será de un 4,1%, pero habrá ganadores y perdedores a escala regional y local.
En España, la tendencia global será positiva, hacia una mayor rentabilidad de este cultivo histórico y tolerante a la sequía (solo limitado por las heladas fuertes y las temperaturas excesivamente altas), aunque en algunas zonas del centro de la península Ibérica el impacto será negativo. Un grupo de científicos ha examinado la evolución previsible de los olivares en las condiciones impuestas por el cambio climático en el Mediterráneo, de donde procede el 97% de la producción mundial.
La investigación, publicada esta semana en la revista Proceedings de la Academia Nacional de Ciencias estadounidense, tiene en cuenta tanto la respuesta de la planta (Olea europea) a las condiciones del calentamiento, como la de la mosca de olivo (Bactrocera oleae), su principal plaga, y la interacción entre ambas, ya que una y otra tienen diferente tolerancia a la temperatura. Es decir, que en una región puede no aumentar mucho la cosecha pero, si se reduce notablemente la infección de la mosca que deteriora la aceituna y reduce la productividad del árbol, los beneficios pueden subir notablemente. No hay que olvidar que los modelos de proyección climática indican que el Mediterráneo, debido al incremento de la concentración de gases de efecto invernadero en la atmósfera, sufrirá una subida notable de las temperaturas, pero el olivo tiene unos límites dentro de los cuales puede sobrevivir o incluso ganar productividad, mientras que la mosca que lo infecta está condicionada por márgenes diferentes.
La floración del olivo se adelantará en toda la cuenca mediterránea sobre la estacionalidad media actual, y llegará 18 días antes en áreas de la península Ibérica, norte de África y Grecia.
Los beneficios del cultivo de la explotación del olivo aumentarán en zonas de España e Italia debido al incremento de las cosechas, que compensarán con creces los niveles de infección de la mosca, el coste mayor de su prevención y eliminación así como una menor calidad del aceite, concluyen Luigi Ponti (Agencia Nacional de Nuevas Tecnologías, Energía y desarrollo Económico Sostenible, en Roma) y sus colegas. Sin embargo, en algunas zonas del centro de la península Ibérica y del norte de Portugal los beneficios decrecerán debido a los altos niveles de infección y sus costes asociados.
En el norte de África, sin embargo, los beneficios aumentarán, aunque se reduzcan ligeramente las cosechas, debido al menor nivel de infección de la mosca, la reducción de costes para hacerle frente y la mejora calidad del aceite. En Oriente Próximo, las cosechas disminuirán.
Los cambios que cabe esperar de la productividad en cada lugar se deben, sobre todo, a los diferentes efectos del aumento de la temperatura en la mosca y en el olivo. Así, pese al aumento medio total de las cosechas en la cuenca Mediterránea del 4,1%, los científicos anticipan una reducción del nivel de infección del 8% y un aumento de los beneficios netos obtenidos por la explotación del cultivo de un 9,6%. Las poblaciones de mosca disminuirán en zonas altas y con inviernos fríos, así como en áreas donde las temperaturas estivales rozan o superan el máximo tolerable por esta especie.
Ponti y sus colegas advierten de que los olivares de bajo beneficio probablemente se abandonarán en muchos lugares, con el consiguiente mayor riego potencial de incendios, la degradación del suelo y la pérdida de biodiversidad.

Más lluvia y a la vez más sequía en España

E.G.S.
El informe de la OMM (Organización Meteorológica Mundial) destaca acerca de España que las precipitaciones durante el año 2013 fueron un 20% superiores a la media histórica, pero con “grandes diferencias geográficas”. Mientras algunas zonas costeras del Atlántico registraron un aumento del 50% sobre los valores habituales, regiones del Mediterráneo estuvieron más secas de la media. El mes de marzo fue el más lluvioso desde que hay registros nacionales (1947), añade el informe.
“Más que el cuánto ha llovido, lo anormal ha sido cómo: todo por el oeste, procedente de una borrasca tras otra llegadas del Atlántico”, explica Ana Casals, portavoz de la Agencia Española de Meteorología (Aemet). “Hemos tenido récord en número de días con tempestades en el mar y aviso rojo. En cambio, en Valencia, la sequía ha sido récord. De 151 años con registros en la ciudad, nunca en un invierno se había registrado tan poca agua”, añade.
Los temporales en el mar han sido una de las características extraordinarias del año. La Aemet llevó a cabo un estudio para analizar el oleaje. Concluyó que desde 1957 no había habido otro invierno con tanto oleaje, pero no debido a la intensidad o a la altura de las olas, sino a la frecuencia de los episodios. La Aemet decretó hasta siete alertas de nivel rojo por fuerte oleaje, cuando lo habitual es que no superen las dos o tres.
Las peculiaridades climáticas en el resto de Europa incluyen, según la enumeración del informe de la OMM, el verano más húmedo en el Reino Unido desde 1910 o las inusuales —por elevadas— temperaturas en Suecia en febrero. Turquía, en cambio, tuvo un 13% menos de precipitaciones de lo habitual, lo que generó sequía.


La contaminación mata a siete millones de personas al año, según la OMS

La polución del aire es el principal riesgo medioambiental para la salud

Uno de cada ocho fallecimientos se relaciona con la exposición a ambientes contaminados

Las enfermedades prevalentes son los ataques cardiacos y los accidentes cerebrovasculares

Una imagen de la contaminación en Barcelona. / CARLES RIBAS
Más de 7 millones de personas mueren anualmente en el mundo a causa de la contaminación ambiental ya sea fuera o dentro del hogar, lo que convierte a la polución en el principal riesgo medioambiental para la salud. Así lo denunció hoy la Organización Mundial de la Salud (OMS) que presentó las últimas estadísticas sobre contaminación, que demuestran que una de cada ocho muertes en el mundo están relacionadas con la exposición a ambientes contaminados.
"Las cifras son sorprendentes, son dramáticas. Y es un problema que afecta a todos, tanto a países en desarrollo como desarrollados. Pero tenerlas ya es un primer paso positivo, porque nos da el conocimiento para poder actuar y resolver el problema", explicó en rueda de prensa María Neira, directora del departamento de Salud Pública y Medio Ambiente de la OMS.
Los cifras actuales surgen de las estadísticas de mortalidad mundial en 2012, y antes de estas, los últimos datos con los que contaba la agencia sanitaria de Naciones Unidas, que databan de 2008, indicaban una cifra de fallecimientos relacionados con la contaminación ambiental de 3,5 millones, exactamente la mitad de los revelados ahora.
Neira especificó, sin embargo, que no debe entenderse que en seis años los casos se han duplicado, sino que nueva metodología y nueva tecnología han permitido hacer una radiografía más precisa de la situación. De los 7 millones de decesos, 3,7 tienen por causa la contaminación ambiental externa, y 4,3 se deben a la polución interna de los hogares, causada mayoritariamente por la combustión para cocinar con madera, carbón o biomasa.
Dado que muchas personas están expuestas tanto a la polución interior como exterior, las estimaciones de fallecimientos no pueden sumarse, y el total estimado de muertes por contaminación se redondea en 7 millones. Los estudios han revelado que el ochenta por ciento de las enfermedades causadas por la contaminación ambiental exterior son dolencias cardiovasculares: un cuarenta por ciento son ataques al corazón y otro cuarenta por ciento son ataques cerebrales.
El restante 20 por ciento de las enfermedades causadas por la contaminación externa lo conforman: las afecciones pulmonares crónicas (11%); el cáncer de pulmón (6%); y las infecciones respiratorias agudas en niños (3%). Con respecto a la polución en los hogares, las principales dolencias que causa son: los ataques cerebrales (34%); los ataques al corazón (26%); afecciones pulmonares crónicas (22%); infecciones respiratorias agudas en niños (12%); y el cáncer de pulmón (6%).
"La polución excesiva es a menudo causa de políticas públicas insostenibles en sectores del transporte, la energía, la industria y la gestión de residuos. En muchos casos, estrategias más sanas también serán más económicas a largo plazo gracias al ahorro en gastos de salud y en la mejora del medio ambiente", señaló, a su vez, Carlos Dora, coordinador de Salud Pública de la OMS.
De los 3,7 millones de muertes causadas por la contaminación ambiental externa, el 88 por ciento de los fallecimientos tienen lugar en países de ingresos medios o bajos, que representan el 82 por ciento de la población mundial. Las regiones del Pacífico Occidental y de Sudeste Asiático son las que más casos padecen, con 1,67 millones de muertes y 936.000 fallecimientos respectivamente. Otros 236.000 decesos ocurrieron en el Mediterráneo Oriental; 200.000 en Europa; 176.000 en Africa; y 58.000 en las Américas. El resto de muertes tuvieron lugar en países ricos de Europa (280.000); Américas (94.000), Pacífico Occidental (67.000), y Mediterráneo Oriental (14.000).
Con respecto a la polución interna de los hogares, la casi totalidad de los fallecimientos tuvieron lugar en países de ingresos bajos y medios, y sólo 20.000 en naciones ricas. Las regiones del Sudeste Asiático y del Pacífico Occidental fueron las que más muertes contabilizaron, 1,69 y 1,62 millones respectivamente. Otros 600.000 decesos ocurrieron en Africa; 200.000 en el Mediterráneo Oriental; 99.000 en Europa; y 81.000 en las Américas. Por ahora, la OMS no tiene datos de contaminación por ciudades, pero está trabajando en un informe al respecto, que será hecho público en los próximos meses.



El municipio filipino de Tolosa tras el paso del tifón Haiyan. / J. J. (REUTERS)

Un clima cada vez más extremo

Los científicos alertan de un aumento de fenómenos radicales. 13 de los 14 años más cálidos se han producido este siglo

el dispreciau dice: hay gente que no quiere ni hablar del tema, hay otra gente no quiere escuchar del tema, y hasta hay gente que no quiere saber nada con el cambio climático, sin embargo, éste está instalado y covivirá con esta etapa de la humanidad, acrecentándose, agravándose y hasta nutriéndose de otras alteraciones que se vienen manifestando en el universo, por caso el SOL mismo que está muy inquieto y dejando en claro que tiene capacidad para esterilizar la atmósfera terrestre, tal sucedió hace apenas escasas semanas.

la temperatura media del planeta ha excedido las consideraciones científicas más optimistas, y ahora el mundo humano (único) está envuelto en medias complejas donde el aire, el agua, y los suelos, están reaccionando químicamente de manera distinta a la esperada, modificando los resultados esperables en unos y otros, acumulando energías diferenciadas que el hombre desconoce y que, por ende, no sabe cómo manejarlas... sumándose a ello los propios desatinos del hombre corporativo, empecinado en depredar a como sea, antes que se lo lleve otro... al punto que los suelos están quedando expuestos al magma de la Tierra, así como las aguas a sus vapores y los aires a reacciones químicas desconocidas... generando una sopa cuya resultante no es ni será buena para el ser humano como raza, aún a pesar de las necedades de los gobiernos y los estados ausentes, empecinados en no ver...

léase, los extremos están instalados y prometen más males que cosas buenas...

léase, los signos son muchos y las señales más, pero nadie atiende lo que no se quiere ver, mucho menos entender, y desde luego abordar para solucionar, rectificar, y/o resolver...

¿preocupante?, sí, pero a estas alturas ya ningún proceso es reversible, y la naturaleza promete facturarle sus pesares al ser humano, sin distinción de credos, razas, o lugares... por consiguiente, nuevos males son esperables en el corto y mediano plazo, asegurando que nadie puede estar preparado para ello, porque el primero en no estarlo es el propio estado ausente, entendiendo por él a todos los estados del planeta humano, ocupados por derechas e izquierdas que no ven, no oyen, no piensan, no entienden, y tampoco les importa...

las cifras de la OMS no contemplan todo el potencial destructivo de un cambio climático... ya que el cambio de temperaturas da más vida o prolonga más la vida de bacterias y virus conocidos, así como de otros tantos de los que el hombre no está ni enterado que existen... entonces, lo que hoy es una estadística, mañana mismo puede convertirse en una catástrofe humanitaria de proporciones, sin que nadie atine siquiera a enterarse de qué se trata...

2014 será un año de sorpresas no gratas, y 2015 lo será aún más... mientras el folklore humano mundial prefiere aturdirse y mirar hacia otro lado, los hechos seguirán convocando la atención mundial poniéndole el rostro de tragedias crecientes... desde luego, los estados ausentes están empecinados en que el vulgo no sea consciente de sus corrupciones y de sus sociedades con las mafias, por ende, poco tiempo puede concederle al drama humano global en ciernes... robar permite a las clases políticas pavonearse delante de los pobres, míseros mortales nacidos para sufrir y ser sometidos y esclavizados por el imperio de un dueño único, que por tener demencia senil, no sabe diferenciar entre lo manipulable y lo manejable, habiendo entonces quebrado todos los equilibrios posibles de los que depende el planeta Tierra para que el ser humano trasite su destino... 

es evidente que algo anda mal en el coco del poder... y ese mal, promete disimular las consecuencias de sus actos negligentes e irresponsables... algo que no evitará que las cosas que tienen que suceder... lo hagan (sucedan). MARZO 25, 2014.-

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