sábado, 29 de agosto de 2009

MÓNICA BASUALDO y el HOGAR JUANITO


Personajes de la Ciudad
Mónica Basualdo, la mujer que soñaba con proteger a los niños
Es una de las responsables del Hogar Juanito, que alberga a menores y adolescentes separados de sus padres en situación de vulnerabilidad

Noticias de Información general: Sábado 29 de agosto de 2009 | 01:47 (actualizado a las 02:48)
Por Sol Amaya
De la Redacción de lanacion.com
mamaya@lanacion.com.ar

"El niño que deja de jugar no está a salvo", dice, mientras sus ojos se llenan de emoción al relatar cómo se cumplió su sueño. Se trata de Mónica Basualdo, una de las principales responsables del Hogar Juanito, que alberga a niños y adolescentes en situación de vulnerabilidad y violencia familiar.

"Desde chica tenía el sueño de hacer algo por los chicos", cuenta Mónica, y recuerda que cuando iba a una escuelita rural donde su madre era maestra, llevaba zapatillas y otras prendas que juntaba para darles a sus compañeritos.


Video:una mujer que lucha por los derechos de los niños (abrir acceso original)


En el Hogar Juanito hoy hay 21 menores, de 1 a 21 años. Todos ellos vienen de situaciones tristes y difíciles, y allí son albergados a la espera de la decisión del juez, que puede ser tanto el retorno a sus familias, si lo considera seguro, como la adopción.

"No soy la madre de estos chicos, y somos muy claros con ese concepto, porque ellos tienen sus propios padres y hay que respetar eso", explica Mónica, y aclara que lo que ella tiene hacia estos chicos es "una función" materna y paterna. "Mi rol es acompañarlos en el humor, el aprendizaje y fundamentalmente a través del juego, que es un elemento esencial de la infancia", agrega.

Un equipo interdisciplinario de al menos 90 personas acompaña a Mónica en este trabajo. "Algunos creen que esto es una sociedad de beneficencia, pero estos chicos no necesitan sólo alojamiento y comida. Lo que necesitan es una segunda oportunidad para vivir una infancia y una adolescencia digna", cuenta la mujer, que es madre de dos jóvenes de 16 y 17 años.

En el hogar hay muchos niños que son hermanos entre sí, lo que hace que la adopción sea muy difícil, sobre todo si tienen más de tres años.

Una sonrisa, una oportunidad, un proyecto de vida y sobre todo dignidad. Esas son las cosas que Mónica quiere para estos menores. "A veces me toca acompañarlos en situaciones muy dolorosas, como por ejemplo presentarse ante el juzgado, contar sus historias, que casi siempre son muy duras", relata.

Mientras Mónica cuenta su historia, el Hogar es pura vida alrededor. Los menores de las dos casas (una para las niñas y otra para los niños) se preparan para tomar el té, ver la televisión o hacer las tareas acompañados por los miembros de la Fundación. Algunos de los chicos todavía están en la escuela o en otra actividad que, gracias a todos los que ayudan con el Hogar, pueden realizar.

"Queremos que todos colaboren con este proyecto, que todos formen parte de la segunda oportunidad que estos chicos reciben", dice Mónica. Y agrega: "Cuando veo que cada uno de estos niños puede armar su propio plan de vida accediendo a las oportunidades que todos los menores deberían tener, me siento feliz".

Contactos para colaborar con el Hogar Juanito:
Teléfono: 4554-6603
fundacionjuanito@fibertel.com.ar
www.fundacionjuanito.org.ar

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Es una de las responsables del Hogar Juanito, que alberga a menores y adolescentes separados de sus padres en situación de vulnerabilidad

lanacion.com | Información general | S?do 29 de agosto de 2009


el dispreciau dice: nuestra querida Argentina se debate hoy entre la incoherencia y el mesianismo de los pocos en desmedro de nosotros, los muchos. Entiendo que he expresado reiteradamente mi sentimiento, que se condice con el de muchos, no puedo decir que es ni semejante ni equivalente al de todos, aunque sí siento que son muchos... y me alcanza con convertir en el anónimo sonido de sus voces. Por ello, harto de apreciar la distancia que hay entre las palabras vacías que llenan los discursos y las realidades que transitamos los que estamos obligados a sobrevivir, prefiero compartir con usted este ejemplo de vida... dado por aquellos que comparten sus ganas, su voluntad, su esperanza, y la sabiduría de entender que hay otros muchos que ya ni eso tienen... aún, cuando ellos mismos no tienen nada más..., que la grandeza de abrir la mano y acondicionar la mente para ayudar al prójimo. Agosto 29, 2009.-

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