Sábado 01 de diciembre de 2012 | Publicado en edición impresa
Preocupación
La Quiaca, la ciudad donde denunciaron 60 desapariciones
El último caso fue la ausencia de sus hogares de dos adolescentes
Antonela Ramos y Gloria Mendoza son dos adolescentes de 14 y 16 años, respectivamente. Desde hace dos meses, no hay noticias suyas, desaparecieron en La Quiaca, en Jujuy, una ciudad donde los casos de este tipo se repiten y ya suman 60 las denuncias por desaparición de personas: la mayoría son menores.
Las dos adolescentes salieron de la escuela para festejar el Día de la Primavera y jamás volvieron. Karina, la madre de Ramos, viajó a Buenos Aires para buscar ayuda, ya que todavía no sabe nada de su hija y recibió "amenazas".
Hace unos días, le llegó un mensaje de texto a su teléfono celular: "Mami soy tu hija, tengo miedo, estoy con dos hombres que me quieren violar".
La de Ramos y Mendoza no son desapariciones aisladas. LA NACION contó 76 carteles en el Puente Internacional que divide La Quiaca con Bolivia, que piden por la aparición de personas, en su gran mayoría menores de edad.
Según sospechan los investigadores, las personas cooptadas por las redes no cruzan el paso legal, lo hacen por otros puntos de una geografía muy alta. El promedio supera los 4000 metros sobre el nivel del mar. Los traficantes de personas son veteranos de un territorio de casi imposible acceso, donde la tierra se parte y el frío azota sin piedad, según explicaron fuentes oficiales.
La desaparición de personas en La Quiaca y Villazón tomó estado público cuando se descubrió el primer caso, en septiembre de 2007, que fue denunciado por la cónsul general de la Argentina, Reina Sotillo, quien adoptó desde entonces un rol activo en la recuperación de víctimas.
Aunque Sotillo se niegue a dar números oficiales, LA NACION pudo contar, desde ese primer caso, la recuperación de más de 1500 personas, de los cuales cerca de 500 tenían menos de cinco años. En 2012, la recuperación y restitución "no bajó de tres personas cada dos semanas, a veces más", afirmaron las fuentes consultadas.
Mientras la última semana se recuperaron tres víctimas en la frontera y en Tucumán se espera el fallo del emblemático caso de Marita Verón, ayer el proyecto de ley de trata de personas habría perdido estado parlamentario en el Congreso de la Nación.
La iniciativa legislativa pretendía introducir cambios en la ley aprobada en 2009 después de la incansable lucha de Susana Trimarco, la madre de Verón.
"Si hay sesiones extraordinarias y la Presidenta Cristina Kirchner lo incluye en el temario, podría no perder estado parlamentario", dice Manuel Garrido, diputado radical, vocal de la Comisión. Hasta ayer, no se dijo nada..
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