El Golfo rico en petróleo se vuelca hacia la energía renovable
- La mayor frecuencia de fenómenos extremos inducidos por la crisis del clima y la presión de la opinión pública están obligando incluso a los principales países exportadores de combustibles fósiles del Golfo a dar un gran salto hacia las energías renovables.
Solo en enero, los Emiratos Árabes Unidos (EAU) organizaron el Décimo Foro de Energía de los Emiratos Árabes Unidos, la Cumbre Mundial sobre la Energía del Futuro, la Semana de la Sostenibilidad de Abu Dhabi y una Cumbre sobre la Futura Sostenibilidad.
Desde este mes de febrero y por lo que resta del año, Dubái acogerá la Conferencia Internacional sobre Energía Renovable y Sostenible, la Conferencia Internacional sobre Energía Verde y Tecnología Ambiental, una Semana Verde y un Congreso sobre Biocombustibles y Bioenergía.
Emiratos Árabes Unidos es el séptimo mayor exportador mundial de petróleo crudo, con un 5,5 de cuota de mercado, pero se está promocionando como un país bajo en carbono. La ciudad de Masdar, un modelo para la vida urbana sostenible, está surgiendo en las afueras de Abu Dhabi, diseñada por el estudio británico del arquitecto Norman Foster y sus socios.
Un parque solar de 10 megavatios (MW) fuera de la ciudad proporciona energía solar para los edificios de oficinas, que incluye la sede regional de Siemens e IRENA (la Agencia Internacional de Energía Renovable). Los cónclaves de la industria petrolera que solían centrarse en las tendencias mundiales de precios, prospección y nuevos campos petroleros ahora tienen reuniones sobre energía solar y eólica.
«Nos tomamos en serio la seguridad energética, y tenemos una estrategia para una combinación de energía que incluya energías renovables», dijo Suhail bin Mohammed Faraj Faris al Mazrouei, ministro de Energía e Industria de los EAU en la inauguración del Foro de Energía en enero.
Ese plan de descarbonización interno significaría que el país para 2050 producirá 38% de su energía a partir de gas, 44% a partir de energías renovables, el 6% a partir de energía nuclear y el uso de fósiles se reducirá a 12%.
En el resto de la región del Golfo, rica en petróleo, la energía basada en el petróleo caerá de 91% actual a 41%, y las energías renovables subirán de 9% actual a 59%.
Con 10 millones de habitantes, la huella de carbono por persona de los EAU es de 23 toneladas por año. Aunque su proceso de descarbonización reduciría las emisiones totales, los EAU seguirán siendo un importante exportador de combustibles fósiles en el futuro.
Pero los participantes en la conferencia consideraron que no había otra opción que pasar del petróleo a un combustible fósil más eficiente como el gas, y promover la energía solar y eólica en el área de los servicios públicos.
Incluso los ejecutivos de la industria petrolera pidieron un enfoque ecológico. Raoul Restucci, director gerente de Desarrollo de Petróleo de Omán, afirmó: «Las crecientes necesidades de energía… las presiones del cambio climático y la innovación tecnológica significan que las compañías petroleras nacionales deben gravitar hacia las energías renovables para una competitividad y sostenibilidad a más largo plazo».
Este año, Omán está encargando un parque solar de 100 MW. Arabia Saudita se está convirtiendo en una “Arabia Solar” al integrar la energía solar concentrada (CSP) con sus plantas térmicas existentes para generar casi dos gigavatios (GW).
El mayor exportador mundial de petróleo está agregando 300 MW de energía solar fotovoltaica y un proyecto eólico de 400 MW, y está pensando en grande: generar 200 GW de energía solar para 2030.
Los EAU tienen como objetivo reducir las emisiones de dióxido de carbono (CO2) en 70%.
Para ello, Dubai está instalando el parque solar localizado en un solo lugar más grande del mundo para producir 1000 MW, que se actualizará a 5000 MW en los próximos 10 años.
Otra planta de CSP generará electricidad 700 MW incluso después del anochecer con almacenamiento de sal fundida. En otras partes, las plantas solares equilibran la fluctuación en la generación bombeando agua a las represas hidroeléctricas, mediante la liberación de agua a través de turbinas durante la noche.
«Por mucho que pasemos a las energías renovables del transporte o la electricidad, aún tendremos que depender del petróleo y el gas porque tenemos que equilibrar la carga base por la noche», explicó Jan Zschommler de DNV GL, el grupo consultor de sostenibilidad con sede en Noruega.
Las proyecciones muestran que, aunque el petróleo suministrará 17% de la energía en todo el mundo en 2050, el gas de origen fósil será la principal fuente de energía desde mediados de la década de 2020, pero en los siguientes 20 años habrá un cambio hacia el biogás no fósil.
El costo de los paneles solares fotovoltaicos se ha reducido en más de 90% en los últimos 10 años, y el precio de las baterías de iones de litio se ha reducido en 80% y las turbinas eólicas en tierra en 75% en el mismo período. Para 2025, será más barato fabricar y operar vehículos eléctricos que los movidos a gasolina.
Sin embargo, incluso si la mitad de todos los automóviles del mundo son eléctricos, la demanda de petróleo y gas natural crecerá en el futuro cercano.
Nobuo Tanaka, de la Fundación para la Paz de Sasakawa, aseguró: «El pico del petróleo no ocurrirá antes de 2040 porque incluso si los vehículos livianos se vuelven eléctricos, habrá una mayor demanda de la aviación, los barcos y los camiones, así como de la industria petroquímica”.
“Esa puede ser una buena noticia para Medio Oriente pero son malas noticias para el planeta”, sentenció.
T: MF
No hay comentarios:
Publicar un comentario