Martes 15 de Marzo de 2011 09:48 | Hubo un incendio en el reactor cuatro, mientras que en el número dos se produjo una explosión.
50 operarios de Fukushima luchan para impedir una catástrofe nuclear.
Hace unas horas evacuaron a los 800 ingenieros que trabajaban en la central.
Detectaron partículas radiactivas en Tokio, a 240 kilómetros del lugar.
. La radiactividad aumenta tras otra explosión en Fukushima. REUTERS
TOKIO, Japón.- Las autoridades de Japón advirtieron sobre un posible aumento de la radiación tras un incendio y una explosión en la central nuclear de Fukushima, en torno a la cual se declaró una zona de exclusión aérea de 30 kilómetros, después de que el sábado los habitantes fueran evacuados.
El nuevo estallido sacudió, esta vez, al reactor número dos. Y elevó el nivel de alerta nuclear al 6 en una escala de 7, según la Autoridad de Seguridad Nuclear francesa. Horas después, el Gobierno nipón reconoció lo alarmante de la situación. Además informó de que otro reactor, el número cuatro, sufrió un incendio (ya controlado).
"El peligro de más fugas de radiación está creciendo", advirtió el primer ministro, Naoto Kan, al tiempo que instó a la población a actuar con calma. En Tokio, a 240 kilómetros de Fukushima, comenzó la evacuación de los ciudadanos extranjeros, al elevarse los niveles de radiación y detectar partículas. Yukio Edano, el portavoz gubernamental, señaló que el nivel de la radiación llegó a situarse hasta cien veces por encima del límite normal.
Según trascendió, el agua utilizada para rebajar la temperatura en el interior está sufriendo el efecto contrario, y podría estar empezando a hervir. Mientras tanto, la zona continúa viviendo réplicas del temblor. Fukushima vivió hoy un sismo de magnitud 6,3 en la escala de Ritcher.
La situación generó una gran preocupación en el país; los locutores de televisión repiten mensajes que parecen salidos de una película catastrófica: "cierren las ventanas, no utilicen sistemas de ventilación y tiendan la ropa en casa"... (Especial)
La radiactividad se extiende por Japón, tras el terremoto y el tsunami - La Gaceta
el dispreciau dice: la humanidad está a un nanosegundo de descubrir para qué sirven sus soberbias... está a punto de descubrir que de nada le vale el precio del petróleo, la soja, las acciones, los títulos y las bolsas... está a punto de descubrir que los papeles no se comen y las tragedias tampoco... está a punto de descubrir que este suelo que ha llamado Tierra es su único hogar y que esta misma casa se ha visto invadida por hombres de espíritus miserables, mezquinos, que se han atribuido como dueños y propietarios de una mentira, una mentira que está por ser revelada para la eternidad a efectos que no pueda repetirse. De qué sirve el orgullo?... para ninguna otra cosa que enfrentar a las miserias con sus destinos inducidos. Japón ha sido un ejemplo de muchas cosas y no aprendió las lecciones de otras... nada distinto a lo que asoma por todos lados en la faz la tierra asolada por los intereses y las conveniencias. El hombre no puede ni debe dañar su suelo ya que éste tiene las potestad de cobrar por los daños que se le infringen. Estamos asistiendo a una visión apocalíptica de las propias miserias humanas... queda claro que el hombre no tiene capacidad ni poder ante la naturaleza que lo engendra por un tiempo... aquello sucedido en 2004 fue una señal y una advertencia... para nada atendida porque las víctimas fueron despreciadas y rápidamente olvidadas por un occidente que siempre se ocupa de lo intrascendente y omite las prioridades, transformando sus rutinas en urgencias vacías... otras señales vinieron de la misma mano y otras cosas imposibles sucedieron poniendo en evidencia las falencias de las ciencias de las conveniencias... este año acumulamos ya no sólo señales sino signos de cataclismos simultáneos... el hombre está viendo una expresión clara de las consecuencias de sus miserias en su propio espejo, y esta vez, la naturaleza y las circunstancias parecen no darle lugar a otra sobre-expresión de sus soberbias. Marzo 15, 2011.-
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