Palabras para el recuerdo: este es un homenaje dedicado a JULIO ENRIQUE BELLAGAMBA, hombre de voluntades expresadas y transformadas en legados concretos, muchos de ellos no asumidos, hombre que supo de silencios y de entregas sin desmayos, sin agresiones a los otros, sin segundas intenciones, un ejemplo de lo que fue, de "aquella extinguida guardia vieja" de italianos donde la palabra era garantía de vínculo, de pasado, presente y futuro.
Si el campo te viera hoy, ¿cuánto darías, no?... Pero en tus praderas en las cuales circulas y trasciendes no hay distancias, no hay ni pasado, ni presente ni tampoco futuro, porque sencillamente vives en el santuario de la eternidad que cobija nuestras almas desde siempre y por siempre.
Gracias Julio. Gracias por el ejemplo.
Víctor (un desconocido que te amó y que te lleva en su alma)
viernes, 29 de agosto de 2008
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario