EL DÍA FUERA DEL TIEMPO

La antigua civilización MAYA determinó que según sus estudios astronómicos el día de hoy, 25 de JULIO de 2008, es el día del NO TIEMPO. Hoy, debemos reflexionar y pedir por el mañana que se desatará apenas "mañana"... Día Fuera del Tiempo del año Gregoriano 2008: kin 158. Dice el códice ukulquin: Mañana se inicia el SEXTO SOL: 4-ESPÍRITU su signo. La tierra será barrida.

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Los Mayas, civilización de base matemático-cosmogónica si las ha habido, han sido considerados sincronizadores galácticos que nos legaron un sistema de espacio-tiempo complejo que no encuentra paragón en ninguna de las civilizaciones conocidas de las que se tienen registros históricos aceptados; el Tzolkin un calendario basado en el movimiento de la Luna, ella con sus cuatro fases de 7 días de duración cada una conforman un movimiento armónico de 28 días por luna, lo que hace un total de 13 lunas por año o 364 días de rotación de la tierra en su órbita, dejando un día llamado día fuera del tiempo o día verde, que es el salto a una octava superior una vez por año pues los sistemas galácticos tienen su movimiento en forma helicoidal y no circular.

Este calendario o sincronizador galáctico es siempre eterno y su forma o plantilla es una estructura armónica que representa el tiempo natural, utilizando este calendario acompañamos a la naturaleza en su flujo evolutivo y ella nos acompaña a nosotros.

Respetando este flujo de energía accedemos a la ley del mínimo esfuerzo, que significa con el menor uso de energía obtener el mayor resultado. Los mayas siempre se fijaban en el movimiento de la Luna, nunca iban a sembrar en un tiempo donde se debía cosechar, siempre se fijaban las características de cada Luna para saber qué debían hacer.

El calendario gregoriano es un instrumento totalmente desincronizado, pues su uso contempla una plantilla de 12 meses, con meses de 31, 30, 29, 28, días cada uno, donde ponen un movimiento lunar de 28 días en una plantilla de 30, mezclando parte de dos lunas en un mes, aparte que cada día no tiene mayor sentido, puesto que si no es una fecha importante para nosotros su uso es estrictamente comercial, para los humanos la única y gran fuerza que mueve el uso del calendario gregoriano, es aquello que se representa en consecuencias económicas: ver cuando recibo mi salario, y si lo he recibido, permanecer esperando que termine el mes para cobrar nuervamente, o cuándo es la fecha de cumpleaños (personal o ajena) o alguna fecha importante (personal o ajena), o cuando serán las vacaciones.

El calendario MAYA contemplaba el cumpleaños de las personas de manera móvil, esto es, una vez engendrado el ser, y transcurridos los nueves meses de su gestación, los años se cumplían según fechas móviles en períodos de nueve meses (nada que se corresponda con el actual ejercicio del calendario gregoriano), ocho meses o siete meses según el lapso incurrido en la maduración uterina del ser humano. Ello ameritaba entonces medidas de tiempo distintas a las consideradas hoy, más reales, más genuinas (Nota del Blog) y afines a las personas y su lugar en el espacio-tiempo. El cumpleaños lo fijaba la fecha en que el ser había sido engendrado (no cuando era alumbrado), siguiendo los ritmos y los tiempos del lapso intrauterino, de forma que los años de las personas seguían elipses y no ciclos circulares. Hoy esto se tendría por una herejía y ya no hay "entendidos" que comprendan la importancia que esto tiene en la vida de cada individuo.

El calendario gregoriano una plantilla irregular que distorsiona el tiempo quedándose solamente en la tercera dimensión, atrapados por el ego, en una energía 12/60, 12 meses con horas de 60 minutos solamente para trabajar y ser productivo, esto solamente nos desincronizan con el tiempo y el ser multidimensional que somos nosotros y nuestro querido planeta.

El calendario MAYA (así como otros contemporáneos) tenían la propiedad de sincronizarse con las dimensiones espaciales por donde circulaba la Tierra. Un sentido que se ha perdido en el tiempo.

Este sincronizador galáctico nos permite acceder a la dimensión que prescinde de las dualidades humanas.

El calendario Maya permite entender que cada día tiene un sentido y una energía que le es propia, conociendo esas energías podemos acceder a los afanes temporales inherentes, actuando en el día a día conforme la naturaleza lo permite. Cada día tiene fuerzas, destinos, guías, análogas, ocultas y antípodas, sabiendo como utilizarlas según las cualidades y sus acciones se favorece la corriente pues todo se conduce en la dirección que estas siguen.

Entendiendo que cada uno de nosotros somos parte de esas energías, por lo que sabiendo reconocer el espacio que cada uno ocupa individualmente, nunca deberíamos ir en contra de nuestra propia naturaleza. El calendario Maya nos permite saber qué energía somos nosotros y qué parte de la "energía general" ocupamos, cuál es el don que nos han entregado para la vida y cuáles son las energías análogas y ocultas que nos favorecen y de esta manera poder crecer según las energías antípodas o asumiendo los desafíos que nos permitirán crecer.

Desde el punto de vista del calendario Maya nosotros somos el cuerpo celular del planeta, si mi información energética y genética dice por ejemplo que soy una célula del hígado del planeta y yo trato de ser otra cosa, estoy yendo contra mi propia naturaleza eso me frustra y me hace sentir mal, sin comprender el por qué, intrínseco.

Cuando me sincronizo con mi propia naturaleza y actúo desde ese punto voy siempre a favor de lo que tengo que ser y no de lo que se supone (o suponen otros) debería ser. También al saber que yo soy una célula del cuerpo planetario comparto con otros seres la misma información lo cual me permite acceder a un trabajo más participativo y comunitario conformando así un órgano de este planeta con una función específica, de esta manera hago lo que vine a cumplir como misión planetaria (destino establecido en el libro de la vida).

Debido al cambio energético de nuestro amado planeta, la Tierra, durante miles de años la vibración magnética fue de 7,8 hz/seg. A partir de los años 80 más o menos comenzó a modificarse esta vibración y hoy esta cerca de los 12 hz/seg., lo que produce una aceleración del tiempo lineal y de nuestro cuerpo energético y biológico, por eso los seres humanos estamos perdiendo la noción del tiempo y estamos comenzando a incorporar el aquí y ahora. Este cambio vibratorio juntos con otros, están modificando las cadenas del ADN energético y el biológico, por ejemplo el cuerpo celular de un humano cambió en un año el 98 % de sus células, menos las células del corazón y las neuronas, cuando nacen las células nuevas estas en su conformación atómica de un núcleo y varios electrones estos son reemplazados por neutrinos, la diferencia entre un electrón y un neutrino es que el primero vibra a 160.000 Km/seg. Y el neutrino vibra a 300.000 Km/seg lo que produce un acercamiento del cuerpo energético al cuerpo biológico, que con este cambio las personas comenzamos a sufrir cambios muy importantes desde el aspecto biológico, energético y psicológico.
Fuente: Manel Berenguer - www.manelylaura.com / México. Tomado del portal y modificado.
Nota: Agradecer a YOSOY por su aportación...