EL ALMA... ESENCIA DE LAS COSAS DE LA VIDA

Señora Presidenta de la NACIÓN Cristina Fernández de Kirchner: cada uno de nosotros tiene un estilo que define su personalidad, y en general el mismo se relaciona con las pautas recibidas por el legado de la educación familiar, escolar (los maestros de otrora)y por la formación universitaria (en caso de haber accedido a dicha posibilidad). Luego cada profesión modela dicho perfil construyendo a lo largo de la vida esa historia que nos individualiza. Usted, nadie puede negarlo (y no soy quien para juzgarlo, simplemente emito una humilde opinión) tuvo un papel destacado en el CONGRESO DE LA NACIÓN. Lo expresan sus colegas de banca tanto como los ejes opositores lo cual aparece como una excelente "referencia" si es que vale el término. Más allá de ello, todos tenemos un pasado, una "historia" modelada por nosotros mismos que ninguno puede borrar. Usted, accedió a la primera magistratura con un respaldo social que excedía la expresión de voto lo cual mostraba un futuro auspicioso. Algo ocurrió luego pero quedó en evidencia un cambio en el foco de la gestión donde se desvirtuaron los roles (a veces las circunstancias del poder producen estos efectos paradojales). Quizás siempre fue así y mi capacidad no me dio (no fue suficiente) para apreciarlo. No obstante ello, no cualquiera puede sostener un mensaje coherente sin leer y aún teniendo una excelente memoria es difícil coordinar los pensamientos y traducirlos a palabras con "contenido". Realmente Usted tiene un Don innegable en tal sentido. Insisto, como ciudadano no estoy en condiciones de juzgar a nadie aunque sí lo estoy para brindar una humilde opinión. Siempre uso en mis ponencias académicas una muletilla en la que creo fervientemente: "criticar es fácil, pero hay que estar en los zapatos de cada quién para saber a ciencia cierta qué lleva a una persona a tomar tal o cual decisión". Los argentinos somos exitistas por naturaleza y eso nos resta reflexibilidad, muchas veces nos pierde horizonte y las más no nos permite diferenciar el arriba del abajo, de ahí que nuestra historia sea un nudo de contradicciones, imagínese Usted, criticamos a las Fuerzas Armadas y sus acciones del proceso (década del 70) pero al mismo tiempo están vigentes jurisprudencias que provienen de dicha etapa (loco, muy loco). ¿Nadie las vió?. ¿Nadie las detectó?. ¿Nadie las descubrió?... eso evidencia una falla de gestión democrática, seria. No opino sobre su decisión sobre la ex-125 (a la que he denominado el 11-M ARGENTINO) porque no tengo conocimientos suficientes en la materia y tampoco es el eje de mi nota hacia su persona y mucho menos hacia su investidura. Sé de salud porque tengo 38 años de trabajo y gestión en la materia. Sí sé que DEMOCRACIA es sinónimo de CIUDADANÍA y ésta lo es de SOCIEDAD, en este caso ARGENTINA. Argentinos somos tanto Usted, como yo, y el resto que hemos nacido bajo esta bendita bandera. Ello implica que esta DEMOCRACIA (mala o buena), esta CIUDADANÍA (mejor o peor) y esta SOCIEDAD (con sus fuerzas y sus debilidades) la hemos construido entre todos, nuestros ancestros y nosotros. Curiosamente, con distintas ideas, y diferentes capacidades todos convivimos bajo el mismo cielo. Eso no nos aleja, por el contrario, debería acercarnos porque justamente el disenso, nos permite delinear un futuro equitativo. Coincido con Usted en que en nuestro país las inequidades son muchas y agregaría de mi peculio: "demasiadas" para una tierra bendecida. Creo (esto es de mi autoría) que muchas entidades agrarias así como sindicales nunca se han ocupado demasiado seriamente de "crear" las fuentes para sostener un "futuro" apropiado a cada unidad productiva. Los argentinos declamamos pero luego "olvidamos" con facilidad y eludimos los compromisos porque el "asado" está primero. Así hemos construido un modelo cultural paradojal donde "decimos una cosa pero hacemos otra distinta" (me hago cargo por lo que me toca y Usted lo hará por aquello que la alcance, si es que es el caso). Nuestra historia está llena de divisiones extremas y conflictos inconsistentes. Nuestros próceres han sido "rescatados" porque en sus respectivos tiempos fueron "lapidados", "expulsados", "descalificados", etc. pero no por ello pueden recibir el mote de "traidores". Traidor no es aquel que piensa distinto sino quien engaña subrepticiamente a los vínculos que lo acompañan en una determinada circunstancia. Como ciudadano no percibo traición alguna en aquellos que han actuado distinto a lo que Usted esperaba, porque todos en lo íntimo tenemos convicciones que nos diferencian (gracias a Dios). Quizás políticamente esto se entienda como una traición pero para mí (que soy un mortal y que no pretendo ser más de lo que soy) traición es sinónimo de mentira, artilugio apropiado para avasallar el derecho y la FE ajenas. He escuchado a algunos co-partidarios (PJ, no FPV) hablar peyorativamente sobre su persona y sobre su investidura, y aún peor, sobre su vínculo matrimonial. Eso es propio de nuestra "mediocridad" y habla mal de quien se escuda tras esos comentarios. No hace falta descalificar al otro... es necesario demostrar y demostrarse que uno puede ser mejor (que el otro). También he escuchado que algunos opositores (UCR, CC, Socialismo, etc.) la han tratado con muchísima responsabilidad ciudadana, lo cual me ha alegrado porque entiendo que así debe ser: Usted es la Presidenta de la Nación y deberá serlo hasta que concluya su gestión. Lo de ayer en Olivos me ha parecido, sinceramente (permítame que lo exprese) pobre. Aún cuando uno siempre se respalda en quiénes acompañan las líneas de pensamiento no es necesario aislar a los que piensan diferente ya que de proceder así, contribuimos con un pensamiento que no se distancia de la etapa del holocausto de los setenta y no creo que Usted piense así (me sorprendería si así fuera). Nadie puede negar los quilates de algunos disidentes como sí bien se podría cuestionar las gestiones e intereses de otros que dicen "pertenecerle". Desde mi humilde saber y entender su investidura amerita una convocatoria a los disidentes de quilates que según veo, pueden contribuir seriamente a su gestión mucho más que lo que puedan aportar algunos desde la obsecuencia. Creo que algunos de ellos, verdaderos ilustres, pueden aportarle a Usted y a su gestión más aún que las propias entidades agrarias que en muchos casos desconocen sus propias realidades de base (evidencia de estos días de conflicto inútil, estúpido e innecesario). En lo personal, como ex-funcionario de multinacional reconozco algunas de sus aseveraciones aunque debo advertirle que hoy por hoy (y desde hace mucho) las empresas multinacionales son más importantes que los propios países ya que defienden banderas propias que exceden cualquier frontera y esencialmente manejan presupuestos que superan largamente a los presupuestos de la sumatoria de naciones involucradas en sus respectivas gestiones (budget consolidado). Creo que durante este conflicto le han mostrado más adhesión los eventuales "renegados" que aquellos que le han palmeado la espalda, sonriéndole en la cara, pero haciendo muecas a su espalda. Señora Presidenta, no la he votado pero tengo por Usted un profundo respeto no sólo por su investidura sino por su manifiesta capacidad. Creo que de cara al futuro que Usted tiene la oportunidad histórica de cambiar el rumbo de esta nave llamada ARGENTINA, dicha oportunidad se la el género tanto como sus capacidades intrínsecas y no se olvide: "los ilustres renegados". Para ello, Señora, escuche a quienes pueden aportarle desde el disenso (esos son los que verdaderamente aportan "valor agregado"). Los que le cantan al oído son obsecuentes que buscarán otra planta donde adherirse el día que su tiempo haya pasado. Por favor, dése esa oportunidad y denos la oportunidad de vivir una realidad diferente. Los DERECHOS HUMANOS que Usted dice defender nos pertenecen a todos y hasta ahora todos hemos sido defraudados por una inseguridad creciente, por indicadores dirigidos, por una educación que pierde calidad día tras día, por una salud cada vez más comprometida, por ausencia de capacidad productiva genuina, por falta de infraestructura, etc. Sé, conozco por mi mismo los compromisos que nuestro país guarda debajo de la alfombra y que la sociedad desconoce, lo cual la habilita (pueblo)a juzgar circunstancias de las que sólo conoce una pequeña porción. Eso desvirtúa los apoyos y desdibuja los futuros de todos. Usted, Señora Presidenta, tiene un futuro promisorio en sus manos y en su mente, por favor, agréguele alma y le aseguro como ciudadano que los resultados la dejarán en el pedestal de la historia. Libérese de los obsecuentes (allí, justamente allí, anida la traición). Un cordial saludo y mi más profundo respeto hacia su investidura. CERASALE, Víctor Norberto DNI 10119347