“Barack significa suerte en árabe”
Por Maria Eugenia Estenssoro / 5 de Noviembre de 2008 Barack Hussein Obama, nacido en Hawai, de padre keniano, madre norteamericana y criado en Indonesia, será el primer presidente negro de Estados Unidos, la mayor potencia mundial. Ni García Marquez con su desbordante imaginación pudo idear una historia tan inverosímil como real.
“Parece una broma pesada. Siete años después del 11 de septiembre y la Guerra de Irak, los norteamericanos votamos un presidente cuyo segundo nombre es nada menos que Hussein, como en Sadam Hussein”, decía con ironía un comediante político en la televisión.
El hartazgo con Bush, que hizo del miedo y la paranoia su principal política, no alcanza para explicar el fenómeno Obama. Hace un año era Hillary Clinton la mejor posicionada para encarnar el cambio que ansiaba esta sociedad. Sin embargo, tras una durísima contienda electoral de 22 meses, el poco conocido senador por Illinois se erigió como el ganador y se convirtió en una celebridad local e internacional. Los jóvenes, considerados apáticos y desinteresados en la política, asistieron de a cientos de miles a sus actos y lo siguen como a una estrella del rock.
La utilización de Internet, los celulares y YouTube para movilizar a sus seguidores y recaudar la suma sin precedentes de U$600 millones de dólares en pequeñas donaciones reveló su gran capacidad de organización e innovación. « Los Clinton sabían organizar muy buenas campañas, pero Obama creó un movimiento », nos dijo un alto dirigente del partido Demócrata, durante las sesiones de trabajo que mantuvimos en Washington, quienes fuimos invitados por el Departamento de Estado para recorrer el país y ver de cerca las elecciones.
“Esta fue la primera campaña con tecnología y métodos del siglo XXI”, señaló un experto. “Y Barack Obama será el primer presidente realmente con los valores del nuevo siglo”.
Hace un año, cuando lo vi por primera vez por televisión, me sorpendió su frescura, su autenticidad. Justamente es su carácter y temple lo que conquistó al electorado. La elección de Joe Biden como compañero de fórmula, un hombre experimentado y sereno, y su actitud responsable frente a la crisis económica, lo diferenciaron diametralmente de su oponente Joe McCain, a quien se lo vió más impulsivo e inestable.
Los Clinton, otrora sus rivales, se han convertido en sus promotores. En un acto en Minessota al que asistí, Bill Clinton lo definió con gran claridad. « Obama va a ganar porque tiene la filosofía, el conocimiento y el carácter apropiados. Por sus orígenes, comprende el mundo complejo y diverso en el que vivimos, donde deben guiarnos no la división sino la integración y la unidad.”
Diversidad, integración, unidad, palabras que han estado ausentes de la concepción del gobierno norteamericano, más anclado en el viejo paradigma de la guerra fría y la seguridad nacional.
Obama sabe que no llegó hasta aquí solo. Otros lo precedieron. Rosa Parks, la mujer que en 1955 rehusó darle su asiento a un blanco en un ómnibus de Alabama, Martin Luther King y líderes mundiales como Gandhi y Mandela.
Al conocerse los primeros resultados una joven blanca, costarricence, me mostró el mensaje de texto que había recibido. Decía: « Rosa se sentó para que Martin pudiera caminar; Martin caminó para que Obama pudiera correr; y Obama corrió para que nuestros hijos puedan volar. »
Barack significa suerte en árabe. La esperanza ha renacido no sólo en Estados Unidos sino en el mundo.
© La Nación - 05-11-2008
5 de Noviembre, 2008 - 12:46
CERASALE VÍCTOR NORBERTO dijo:
Estimada SENADORA María Eugenia Estenssoro: el triunfo político de Obama en los Estados Unidos de Norteamérica, nada menos que allí… indica cuán harta está la gente de los atropellos. El paso de Bush por la CASA BLANCA ha dejado un sabor amargo que la sociedad americana (y gran parte del mundo para no decir todo el mundo) pretende transformar tanto hacia adentro como hacia afuera. El común necesita tener respuestas a sus demandas genuinas y en estos años de gestión REPUBLICANA lamentablemente ha sucedido no sólo el aislamiento sino también la omisión y el olvido.
Esto demuestra claramente que los “elegidos” mediante el ejercicio democrático se deben a su gente (antes que a sus votantes). Deben priorizar la “gente y sus necesidades” antes que sus intereses.
Suena irreal, pero las demandas contenidas de las gentes son de tal envergadura que ameritan ser resueltas ya. Estados Unidos de Norteamérica es un excelente ejemplo del sentimiento mundial que fluye por la piel de las personas: 1. Nadie quiere ser atropellado, 2. Nadie quiere ser vejado, 3. Nadie quiere ser obviado, 4. Nadie quiere ser usado…, etc.
Insisto: cuando los excluidos son más que los incluidos, algo anda mal en el mate de la clase que ostenta el poder político.-
Seguramente a Obama no le será fácil su ejercicio del poder en un momento donde hereda varias calamidades traducidas en tres conflictos armados simultáneos, una confrontación política con la Comunidad Económica Europea y un fallo gigantesco que afecta a la economía mundial y que derivará seguramente en un NUEVO ORDEN. Tras todo esto está el vínculo con los países LATINOAMERICANOS, donde Estados Unidos favorecerá a sus vínculos ciertos: México, Brasil y Chile… en desmedro de los inciertos, entre ellos ARGENTINA, como el peor de todos.
ARGENTINA debe ser pro-activa y re-establecer vínculos ciertos con Estados Unidos de Norteamérica y cuando me refiero a “ciertos”, expreso la idea de fehacientes. Sencillamente porque no podemos estar aislados del centro y eje políticos del mundo actual, más allá de los aciertos y errores, de las disidencias conceptuales y de las coincidencias eventuales.
Aunque no parezca, Estados Unidos es muy importante para nuestro país, tanto como lo pueden ser ESPAÑA, ITALIA, FRANCIA, ALEMANIA, HOLANDA o hasta la misma Gran Bretaña. El aislamiento nos ha costado caro y promete más aún. Por ello debe ser revertido como ejercicio y demanda modificar el criterio de gestión.
Si no lo hace el PODER EJECUTIVO porque entiende que no debe sentarse a conversar con alguien a quien supone como “enemigo” (aún cuando no sea así), este acto de civilidad y consenso ciudadano deberá ser ejercido por Ustedes mismos, la oposición que pretende ser tal. Los ARGENTINOS, ciudadanos comunes, pretendemos (perdón la generalización) no vivir aislados de países referentes aún cuando en lo personal no sobrestimo ni subestimo a ninguno de ellos (los conozco a todos desde dentro).
No le cabe a Obama ni a sus funcionarios acercarse a la ARGENTINA que viene rechazando sistemáticamente todos los intentos diplomáticos, empresarios, económicos, o de simple gestión, para generar acercamientos, acuerdos o simples concordancias.
Léase, debe ser la ARGENTINA la que tome la iniciativa. Dado que el orgullo impulsa la necedad es difícil pretender que el ejecutivo modifique su conducta. No obstante ello, al igual que allá, esta gestión caducará en su tiempo y para cuando eso suceda la oposición política debe tener vínculos ciertos, desarrollados y prontos a ser ejecutados (ejecutables en potencial).
ARGENTINA es hoy un NICHO de CORRUPCIÓN POLÍTICA y de ANTOJOS PERSONALES que desbordan sobre la ciudadanía TODAS LAS MISERIAS QUE ESTÁN A LA VISTA Y MUCHAS OTRAS QUE NO SE VEN PERO EXISTEN.
Es hora que Usted/es tomen la iniciativa y muestren que nosotros, los de abajo, queremos otra cosa. Más allá de lo político, estrictamente político, no hay diferencias entre la sociedad americana y la nuestra más allá de las pautas culturales que dieron el origen diferencial a cada una… Por ello, es hora que además de viajar para comprar vestidos, carteras y zapatos, nuestros representantes se dediquen a construir el MAÑANA NECESARIO. Para ello, ESTADOS UNIDOS DE NORTEAMÉRICA, debe ser una de las prioridades estratégicas.
Tenemos mucho que aprender y otro tanto para ofrecer, tomar la oportunidad depende exclusivamente de NOSOTROS.
Un cordial saludo
CERASALE
http://wwweldispreciau.blogspot.com
miércoles, 5 de noviembre de 2008
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